miércoles, 21 de diciembre de 2016

LOTERÍA DE NAVIDAD
















HISTORIA



Hoy es el día apropiado para este tema por motivos obvios, así que vamos a desmembrar todo lo que rodea a esta ya casi tradición navideña, la historia de la lotería navideña empieza en 1812, en Cádiz para, que las cortes allí establecidas se hiciesen con un poco mas de viruta ya que España en aquellos años no pasaba por su mejor momento, ya sabéis, Carlos IV, Napoleón, Pepe Botella, el infame Fernando VII (el rey mas anormal de la historia incluido Carlos II el regular) , bueno pues en el contexto histórico que nos movemos las Cortes de Cádiz decidieron  como he dicho antes ganar algo de panojita, que tampoco es que les sobrase, desde el primer sorteo los niños de San Idelfonso estaban ahí dando las buenas nuevas a los que eran afortunados con el premio, por aquel entonces el billete valía 40 reales y el premio ascendía a las 8000 pesetas, el primer número agraciado fue el 03604, desde entonces 204 años de historia nos contemplan.
Algunos de los cambios más significativos sobre el sorteo fue que la denominación de “sorteo de Navidad” no fue puesta hasta 1893 y que antes de 1913 el sorteo se realizaba con papeles, a partir de ese años se empezaron a usar los afamados bombos que actualmente conocesmos, por otro lado el sorteo del niño no se popularizó hasta 1941, después de la Guerra Civil aunque imagino que el motivo fue el mismo que impulsó a la creación del sorteo de Navidad y el nombre de décimo viene de que el billete completo serían 10 de los que compramos habitualmente, una costumbre que solo hacen para liarnos, pero que se subsana si todo lo que dicen los niños lo divides entre 10, ya que es realmente la parte que juegas.

ESTADÍSTICAS

Los premios más repartidos, como los aclaman los entendidos, que realmente lo son, tienen varias peculiaridades, entre ellas que la posibilidad que seas agraciado con el gordo, el segundo o el tercer premio, son las mismas 1/100000, que la afamada pedrea solo toca al 1,74% de los participantes y que los reintegros llegan al 10% de los billetes, claro que tanto la primera como la última estadística si no sois imbéciles es fácil de sacar, las terminaciones mas repetidas a lo largo de la historia han sido el 5 y después el 4 y el 6, por el lado contrario se encuentran el 1 y el 2 como las terminaciones menos exitosas a la hora de premiar a sus dueños, nunca se ha repetido un número completo del gordo de navidad, pero terminaciones como 85 han sido agraciadas con premios hasta en  7 ocasiones, haciéndole un número de la suerte en este sorteo.

ESTABLECIMIENTOS

Sort (creo)
Los premios históricamente han caído en Madrid y Barcelona, otra de esas cosas de Perogrullo, donde mas gente hay, mas gente compra, mas veces toca, ley simple y llana de la estadística, pero si nos ponemos un poco mas rebuscones con los establecimientos que tradicionalmente mas venden lotería, encontramos dos, La Bruja de Oro, aunque se encuentra en Sort, Lérida (que nombre más apropiado) vende a todo el estado, principalmente a su región más cercana en Cataluña abrió sus puertas en la década de los 80, actualmente su venta se hace mayormente vía on line, con más de un 85%  de sus compradores, el segundo Doña Manolita, su primera administración fue abierta en 1904, en la Calle San Bernardo, la señora Manuela murió allá por 1952 pero su descendencia se está haciendo de oro, actualmente su sede se encuentra en la Calle del Carmen 22, curioso cuanto menos que los establecimientos mas famosos tengan unas tácticas de ventas tan dispares, desde la modernidad de Bruja hasta la más tradicional Manolita.

CURIOSIDADES

En 1949 un hombre soñó con un número, compró un décimo y le tocó, en 2009 un inmigrante de origen desconocido pasó de vender en el top manta a llevarse el segundo premio de la lotería, dos amigos, uno en Sevilla y otro en Madrid, compraron dos décimos para compartir, al terminar el sorteo, uno fue agraciado con el primer premio y el otro con el segundo, la dueña de una inmobiliaria compró décimos para todos sus empleados y se quedó sin el número, ella decidió comprarse uno para ella y ese fue el que tocó (hubiera sido bonito al revés también)



BUKAKE DE FELICIDAD
Y es que si jugamos no es para hacernos ricos, si no para ser parte de esas curiosidades y anécdotas de las que querríamos ser protagonistas, así que suerte, si lo lees antes del sorteo y por favor si no os toca no digáis lo del día nacional de la salud, que ya huele

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